Hola a todos!!

JL nos Enseña maravillas de muchísimos temas!! Entre esas maravillas, nos viene brindando Recorrer de los textos de Borges. Y vez a vez, también desde antes, JL ubica del Poema de Borges: I Ching: "El camino es fatal como la flecha, pero en las grietas está Dios que acecha".

Es decir, que gracias a la grieta, tengo la posibilidad de considerar lo Divino en mí. Y la grieta, es considerar la falla.

Recientemente, redacté un documento en el que dejé por fuera lo que a mi yo se le cantó: el nombre, el significante del Congreso de Magia Iniciática, Paradigma de Nueva Era. Ubiqué el nombre en una parte del documento, y en el resto, no lo ubiqué, y eso aún cuando lo repasé varias veces antes de enviarlo.

No es una cuestión menor, ya que no consideré lo que mi yo no considera. En lo que actué leo mi resistencia a considerar la Iniciación en mi vida, y al no considerar lo Iniciático, eso que no considero, se lleva por delante también la Magia como Paradigma de Nueva Era. El yo usa lo que no para con eso llevarse por delante todo lo que sí.

Ante la proximidad del Congreso, a tan pocos días de tan Enorme evento, tengo que estar advertida, muchísimo más atenta, tomando todos los recaudos que tengo que tomar en el Paso 9. Que estoy en Paso 9, y que me sale al cruce el Paso 11, lo no considerado en mí. Y respecto de los nombres, me doy cuenta en lo que actué (no situé, “en adelante El Congreso”, tal cual sí ubiqué respecto de otras cuestiones en varias partes del documento, y ubico a diario en documentos similares que redacto), también lo densifico en otros ámbitos de mi vida.

Me vengo observando al respecto, mirando hacia la grieta, y he comprobado que es serie en mí confundir los nombres, el significante. Por caso, saludo a alguien por la calle, inclusive a personas que conozco desde hace tiempo, y le encajo otro nombre. Y también lo actúo respecto de textos que leo, dejo afuera el nombre del autor, o lo confundo con otro. Incluso hace unos días, a una compañera de mi nuevo laburo le extrañó la cuestión, cuando luego de hablar con ella un rato, al despedirme la nombré con otro significante.

Al no considerar el nombre, tacho un polo, y mi yo hace la asociación que a mi yo se le canta, dejando afuera lo que si Yo lo considero, le restaría poder. Y el Método nos Enseña que muchísimas veces en el nombre está la aletheia de la que cada uno venimos a curarnos a esta encarnación, y que, también considerando nuestros sonidos rectores, cada quien tenemos de oportunidad de usar a favor lo que si usa el yo, nos lleva hacia el abismo.

Qué inmenso privilegio me/nos propicia el Método de la Magia!

Qué enorme oportunidad de también gracias al Congreso, fundar un antes y un después en mi vida!

Emocionadamente, gracias!