Muy considerados lectores,


Hay muchísimos momentos en el recorrido que parecen muy difíciles. Son en los que si no nos frenamos y seguimos avanzando, se revelan las mejores Enseñanzas y posibilidades de crecer.


En este momento, por cuestiones en las cuales me permití densificar mucho más lo no resuelto en mi, se me hace muy difícil contarles cuestiones de lo que sí estoy logrando, y no por el hecho de que no hayan cuestiones , sino porque entiendo que sería más y más falla créeme que con más y más espejitos de colores de lo que sí pueda disimular el enorme agujero en el cual cada vez más caigo. 

Y caigo en dichos agujeros por no anotar falla en pretender que no haya problema en seguir al yo. Es ahí que lo que son baches y que pueden ser parte del camino, los convierto en pozos que llevan a detenerme y hacer más trabajoso todo lo que sea que hago ya que tengo que hacer el circuito de primero tener que salir del pozo del yo.


Es muy grandioso todo lo que JL nos propicia para aprender en cada una de las situaciones… y se ve muchísimo la diferencia en cuanto conecto con recibir lo que viene de JL respecto a cuando irresponsablemente me dejo llevar por “mi yo” hacia dejar por fuera lo que implica la función paterna.


Muchas gracias por la paciencia de escucharme también en momentos tan difíciles.


Atentamente,

Damián