En la medida que avanza el primer mes de mi año 2021, veo tanto la semilla del éxito como la semilla del fracaso que estoy poniendo en mi año.
Considero un éxito las nuevas vías que encontré por las cuales continuar desarrollando la Medicina Ancestral que yo investigo, y aportar algo nuevo y diferente, donde la Medicina y el Arte sean una unidad, y por eso este año voy a centrarme en desarrollar uno de los pilares fundamentales de la Medicina Ancestral: la Danza Medicinal, y a plasmar eso mismo en mi nuevo video documental. Quiero que todo eso quede plasmado también en mi exposición próximamente en el Congreso en el cual quiero hablar en marzo de este año.
La semilla del fracaso, es que bochornosamente no me interesé en realizar mi Viaje Interior conmensurablemente, y eso implica que no me interesé en apropiarme de mi lugar de Enseñante, que me fue dado por otro.
Entonces, lo que yo hago no lo puedo considerar iniciático, y no está a la altura de lo que digo que quiero.
Aún con todas las oportundiades que tuve en las cuales interesarme en mi Viaje Interior, me dejé solo ante la Oportunidad, y sigo fallando en lo mismo, y eso tiene que quedar bien transparente, porque por mucho que yo logre gracias a aplicar el Método de la Magia, no puedo dejar de ver que no cumplí con lo que dije querer cuando digo que quiero Enseñar.
Considero más que necesario continuar Recorriendo mi Camino de la Magia, y seguir escribiendo estas entradas a mi Blog de Enseñante.