Actualmente, la humanidad cada vez está más sumida en conflictos. Basta comprobar lo que está ocurriendo y redensificándose entre Ucrania y Rusia para comprobarlo. Todos se acusan entre ellos de ser nazis como justificativo para salir a pelearse, y mientras tanto el resto del mundo mira la situación de afuera como público, Europa se cree salvada de tener que responder…
Sin embargo, esto no es un problema a nivel político internacional simplemente. Lo que ocurre a escala mundial entre los países de Occidente es solo un reflejo más densificado de lo que sucede a nivel individual, dentro de cada humano. Es un caso de “combate hacia afuera” de manual.
El mundo actual está poralizado a estancarse en un pozo de combate hacia afuera.
Ese automatismo lo tengo que reconocer en mí mismo para bloquearlo y entonces habilitarme a usarlo. Hace unos años, yo cursaba un título superior en la universidad, por lo cual entre estudios y otras actividades, tenía poco tiempo disponible. De ahí surgían roces y tensiones con mi familia, y lo que me surgía una y otra vez es quejarme de ellos, acusándoles de que me habían convencido de hacer ese curso.
“eso” es hacer combate hacia afuera. Poner el poder en el otro y desde esa excusa lanzarte a pelear hacia afuera. Porque “es por su culpa que yo no consigo lo que quiero”. Sin embargo, eso a lo único a lo que me condujo es a desgastarme, empeorar mi relación a mi familia, no solucionaba algo…
El Método me lo había advertido muy claramente. El combate hacia afuera es una de las tres esfinges, y si caes en esa trampa, no vas a avanzar. A la vez, esa misma esfinge me estaba avisando de que yo tenía la posibilidad de dar un Paso muy grande. A fin de cuentas, la esfinge es una custodia, señala que más allá hay un Tesoro Superior.
¿Cuáles eran los dichos del combate hacia afuera en mí? “Es por ustedes por quienes me metí a hacer el curso”... O sea, pretendía acusar que yo dependía del otro. Y ese era el problema. Durante todo ese tiempo, yo todavía seguía residiendo en casa de mis padres, dependiendo de que mi familia me pagara cosas, comida, alojamiento… Yo ganaba dinero para abonar gastos míos, pero no es que residiera por mi cuenta, no es que yo sostuviera mi estilo de vida en lo real, y tampoco aportaba mucho a la economía familiar.
La misma esfinge me estaba dando pistas de dónde estaba la solución, y es el Método el que me permitió y me permite develar su lógica oculta. Me mostró -y me muestra- que achacar al afuera mis problemas, no solamente es inútil, sino que directamente me provoco daño con eso.
Y gracias a esa experiencia, y especialmente a la ayuda y Exhortación a Crecer que me propicia la Escuela, un año después de ese trecho tan tormentoso, tomé la decisión de mudarme de esa casa, a residir por mi cuenta. Lo cual me exigió ampliar circuitos y sostenerme por mí mismo, primero con conmensurables en lo real de crear mis propios recursos, pagar mis gastos, pagar mi alojamiento y comida, administrarme por mi cuenta…
Gracias a aplicar Método, logré mudarme de Canarias a Barcelona,
abonando por mi cuenta todos mis gastos.
Todo un recorrido para ir más allá del combate hacia afuera. Un recorrido del que tenemos oportunidad todos de aprender, también usando lo que está pasando en Rusia y Ucrania, lo que está pasando en conflictos sociales famosos como la bofetada de Will Smith o el juicio de Johnny Depp contra Amber Heard… Si tú te limpias del combate hacia afuera, entonces estarás protegiendo tu Realidad ante esas fuerzas que polarizan a la sociedad.