Lunes 26 de Abril.


Prometí en las entradas de abril inscribir con qué y como me aferro a La Enseñanza.


En este tiempo de pandemia, quienes recorremos en la Escuela tenemos el privilegio de contar con la guía de Dirección quienes nos brindan las claves para aprovechar este momento de caos y crear en cada quién el pasaje de lo humano a lo Divino.


Dirección nos brinda la Escuela misma (con diferentes actividades y dispositivos) que es el campo perfecto pensado para que yo responda a lo peor de las generaciones anteriores y así genere el acto con el que inscribirle a mi realidad que me interesa habitar mi mejor versión.


Ante la oportunidad, mi respuesta sigue siendo la peor y no acuerdo con continuar permitiéndome la metonimia eterna de actuar desde los automatismos del yo o nada.


En este tiempo de apocalipsis con la caida de los 4 paradigmas imperantes, o me dejo arrastrar al caos que me lleva a la muerte o creo mi propia realidad para habitar la Nueva Era en mí. Y no solamente alcanza con lograr hacer si cuestiones que el yo me dice no, sino que la respuesta proviene de poner no al todono en mi.

Por más cuestiones que logre en mi, si yo no atiendo, a la demanda del no estructural, todo lo que hago si, termina siendo fagocitado por ese todono.


Aferrarme a la Enseñanza en este tiempo es hacer los circuitos para recibir lo que viene de Dirección e interesarme en mi interesándome en dar respuesta.



Agradezco a quienes leen mi blog.

Valeria.