Hola,
En esta entrada de Blog, y en esta fecha tan particular de fin de año e inicio de año nuevo, quiero aprovechar para agradecer las cuestiones que si no fuese por La Escuela, no hubieran ingresado a mi vida, y además para anotar cuestiones que tengo la obligación de anotar.
Este año tuve la Oportunidad de presentar en El Congreso, integrando la mesa de deportes #CuarEntrena. A partir de ahí, se me posibilitó el pasaje a Enseñante Explicativo, abriéndose un Universo Nuevo en mi realidad. Concreté 3 unidades temáticas de “Artes Marciales en Sus Puntos Cardinales”, consiguiendo vez a vez la cantidad considerable de participantes que está referenciado. Además indagué en temáticas que verdaderamente repercutieron para bien y sorpresivamente en mi vida.
También tuve la Inmensa Oportunidad de integrarme a la Conducción de Reuniones GAL, GALI y NET que Propicia La Escuela. Aprendí Muchísimo, y cada una de esas cuestiones me exigió atravesar bordes interiores, y también en lo externo.
Estos sucesos, verdaderamente son joyas brillantes en mi vida, y quiero anotarlos como tal, al mismo tiempo que tengo que anotar que esas joyas que Si alcancé en el transcurso de este año, yo mismo no me encargo de protegerlas, ya que con lo No tomado en mi, las infecto.
Detrás de cuestiones tan brillantes, hay un agujero negro que las fagocita por mi no diferenciación de lo que el yo me dijo No; consecuentemente a mi no Respuesta, permanezco encadenado en una lista de anti Iniciación.
Lo que yo no uso, lo que yo no considero, es lo que alimenta más al monstruo que habita en todos esos lugares en los que no estoy, y que me espera en aquellos lugares a los que no llegué,
La Magia trae cuestiones muy diferenciales y de las más brillantes que jamás yo alcanzaría, y que por arte de Magia las alcanzo… al mismo tiempo, la anti Iniciación me las devora… y yo en el medio, con el mismo problema de siempre, rebotando entre dos, en un bardo.
Ojala Lector que te sean útiles estos escritos, para lo que Si, y principalmente para Considerar lo que No.
Atentamente,
Franco Agustin