En realidad, una de las cuestiones más fáciles que ofrece el Método de la Magia es la alineación de afectos. Muchos se obsesionan con que es la salvación a todos los males, la panacea, el santo grial de la búsqueda espiritual… y si bien es uno de los primeros Pasos y, por tanto, de los que más peso tienen para polarizar todo tu universo, ni es el primero que hay que considerar, ni tiene tampoco tanto misterio.


A fin de cuentas, si las emociones son el Paso 3, es porque depende de los dos primeros Pasos: el caos de ideas y el orden de la palabra. Si aprendes a ordenar tus ideas y tus palabras, las emociones te seguirán fácilmente. Un truco que siempre me viene muy bien es:


Siempre que te surja una emoción desarmónica ante un suceso frustrante, remítete a la pregunta: “¿qué quiero lograr de todo esto?”. Responderte esa pregunta va a correr el eje automático desde el cual surgen los sentimientos desalineados (en otras palabras, la rumia mental). 


Además, para enfocar en la respuesta, tendrás que poner tus ideas en palabras, ahí tienes oportunidad de escucharte, profundizar en desde dónde te vienen los desvíos (qué escena familiar, qué te dijeron cuando eras pequeño, qué asociaciones quedaron inscritas en tu mente…), nombrar un resultado alineado…


De entrada, ya todo eso te permite reorientar tu mente, y en el mismo proceso, se detona menos la emoción desalineada inicial. ¿Ves? No es tan difícil. De ahí en más tomas carrera para seguir con tu decisión de aplicar los Pasos del Método, porque el hecho mismo de que vibres que estás ordenando tu mente proporciona entusiasmo, como cuando vas viendo que limpias bien tu casa. Genera un bienestar, y si eso lo usas para impulsarte aún más, ¡más a tu favor!


***

Ramsés Cabrera

Soy enseñante habilitado por la Escuela a nivel explicativo desde 2017. También participo en la Comisión Directiva de Canal MMAPPA, la revista oficial de la E.D.I.P.O., y desde hace varios años doy conferencias enseñando la Enseñanza principalmente a través de la traducción y la interpretación, en español e inglés.