Algo que pasamos de largo con frecuencia y que naturalizamos es cuando hacemos u otros hacen cuestiones sin ir más allá de la apariencia, del “como”; dejando por fuera todas las demás coordenadas que el Método advierte; Entonces actuamos como si eso que hacemos tuviese real peso y no pasa de ser un “comosi…”

Esta conducta automática lo veo repetitivamente en mi vida y noto que cada vez se disfraza de diferentes formas y muy particularmente pretender que con un “objeto” alcanza; como por caso sería el dar un regalo de cumpleaños sin hacerme presente a la fiesta; o la más básica de todas de criticar en otros eso de lo que padezco; y esto es algo que actúo mucho también en el contexto deportivo y en mi rol de entrenador, pues muchas veces exijo a las Deportistas, cuestiones que muchas veces ni siquiera yo las he resuelto en mí.

Recientemente perdimos un partido con el equipo que dirijo y para muchos puede parecer que es algo normal; sin embargo, hace mas de 12 años que no sucedía y gracias a los momentos recorridos en las conexiones online de un viaje que realizó la Escuela a España, reconocí lugares en los que vengo actuando ese “comosi” y que pasaba continuamente de largo.

Hoy gracias a ese aprendizaje reformulé muchas cuestiones del funcionamiento del equipo que tengo que considerar en mi.

Lo perdido no es posible recuperarlo, sin embargo me exijo sea una marca que determine un Antes y un Después en mi recorrido.

Mauricio Moore Velásquez

*Mauriga*