La Escuela siempre nos propone Viajes. Desde el momento mismo en que entramos a La Escuela entramos a un Viaje que cada quien tiene que lograr que sea un Viaje Interior.
Y dentro de ese Viaje Interior, que es el más importante que nos propone La Escuela, hay también Viajes a diferentes lugares del mundo que son también parte de la propuesta diferencial y única que nos propicia Dirección, donde nos propone conectar con lugares únicos, momentos únicos y un alargue de circuitos que va mucho mas allá de lo que se hace en un Viaje de turismo habitual.
Este año el Viaje es a Madrid. Para muchos de quienes viajamos eso implica cruzar las grandes aguas, y esas grandes aguas no se limitan al cruce del océano. Para mucho de quienes viajamos el viaje también representa el encuentro con las generaciones anteriores, lo mejor y lo peor de las generaciones anteriores.
Este Viaje en particular tiene también la característica de ser un Viaje tri-uno, lo que significa tres Viajes en uno, lo cuál lo hace mucho más desafiante, y ya nos muestra desde el inicio que la Conexión con la terceridad es una de las claves para quienes queremos aprovechar el Viaje y la Oportunidad.
Es el segundo Viaje de Escuela que yo realizo y a mi toca Considerar con qué me encargo de hacer del Viaje mi Viaje, y para eso, lo primero que nos aporta La Enseñanza es que el Viaje empieza desde antes del Viaje, y que para realizar un Viaje desde Enseñanza lo que hay que formular es un Para Qué, y dirigirnos a eso que formulamos como Para Qué.
**Juan Ignacio Costoya**