Mi nombre es Juan Ignacio Olveira y desde hace más de 6 años que recorro actividades en la Escuela E.D.I.P.O.
En el viaje que realice a Barcelona en octubre 2019 donde recorrimos un MMAPPA (Momento Más Allá de lo Pre Pactado) de 3 días, José Luis Parise nos invitó a mirar hacia que es lo que se anota de cada quien en el futuro respecto de nuestro lugar en la Escuela y si lo que se anota no es lo que yo quiero que se anote, que cuestiones hago para que se anote lo que yo si quiero que quede anotado.
Gracias a que José Luis me hizo mirar hacia ahí, veo que lo que anoto de mi en el futuro que es que no se sabe que deseo, “estoy” en las actividades más elevadas de Enseñanza pero como un fantasma ya que no me intereso en aparecer, como si fuese un espectador vip, lo cual es una burla grosera ante las enormes oportunidades que brinda JL y me permito desvalorizar al desaprovecharlas tan enormes y diferenciales oportunidades.
Al retornar a Argentin, gracias a ver que hago de mi deseo un anhelo, comprendo que inconscientemente me llevo en las situaciones a que permanezca oculto mi deseo.
El no ponerle el cuerpo al deseo por via de que no se sepa Qué deseo y que no se sepa Que deseo.
Acualmente me estoy interesando en dedicarle tiempo a las cuestiones que digo querer, lo cual me exige realizar una reestructuración en mi empresa ya que me demanda muchísimo tiempo y en nombre del trabajo desplazo muchas otras áreas en mi vida.
Esta semana logré conseguir la gente que de ahora y en adelante fabrique los productos que desarrollo y yo ya no me ocupo más de hacer esa tarea lo cual me libera mucho tiempo.
Deseo tener tiempo con el que hacerme mi casa propia, generar y sostener mi relación en pareja y dedicarle cada vez más tiempo a la Escuela.
De aqui en adelante, continuaré realizando anotaciones semanales respecto de lo que si hago en función de anotar en mi futuro mi lugar de Enseñante en la Escuela E.D.I.P.O. Y con qué bloqueo el adonde del otro en mi que me lleva a hacer de mi deseo un anhelo inalcanzable. También anotaré si lo que el yo me dice no, sigue siendo no.
De esta manera me comprometo conmigo mismo a ponerme del lado de la luz, de lo divino en mí y que quede anotada mi posición ante lo sagrado.
Muy atentamente.
Juan Ignacio